Miro a las estrellas,
no luce la mía,
no encuentro el camino
no tengo una flor.
¿Dónde te has metido,
porqué me has dejado?
siempre muerdo sueños
solo encuentro malos,
no confundo al menos
sumar con ambición…
Palpo cada instante,
busco el tiempo a un lado
guardo siempre caras
pierdo siempre nombres,
voy ahí con todo
y sale negro y negro,
ahora solo espero
sangre y su color.
Toco ya la muerte,
he pasado un límite,
canto mi condena
y pierdo cada causa,
como siempre frío,
trago cada cuento,
no encuentro argumento
siempre hay corazón.
Corazón de caparazón.